Monday, June 23, 2008

Saturday, June 21, 2008

Sí, a veces, gracias.

Te regalo un gran gracias
un te extraño -a veces-
algunos te quiero -aún-
aunque muchos más fuiste y eres importante.
Un par de besos con sabor a amistad
y uno que otro con la fragancia de antaño.
Quiero obsequiarte un pedacito de recuerdos,
para que no olvides
eso que yo jamás olvidaré;
mas no lo haré -no porque seas inolvidable- sino que
será simplemente por lo bello que fue.
Me gustaría que sintieras cuánto quiero yo, que tú sepas,
la falta que no me haces, pero que a pesar de eso,
no quiero que me hagas.
Ya no vivo de recuerdos, ahora vivo simplemente;
pero quiero vivir sabiendo que estás tú
dentro de algún cajón en mi desordenada vida.
¿Entiendes?
No quiero que salgas de aquí, te extrañaría demasiado.
Quédate -por mientras- en este limbo -ahora eterno- ;
para que cuando sea posible
te pueda ir a buscar así entrar nuevamente en el ahora de mi vida;
pero -por favor- hazme sentir que sí quieres guardarte
-tú, tus recuerdos y los mios, tu vida y anhelos- porque
lo que me carcome no es -ya- la ausencia de tu carne,
más bien el vacío de tu alma.
Creo que algún día entenderás, sabrás y quizás sentirás
mi forma de amar...

Por ahora me conformo con un estoy aquí.